Tratamientos
Servicios y especialidades que
podemos ofrecerte
Trabajamos en la rehabilitación, atención y prevención de lesiones o traumatismos que aparecen durante la actividad física.
Nos permite conocer las posibles patologías, en el pie o en el resto del cuerpo, derivadas de algún desajuste en nuestra pisada.
Utilizada en los tratamientos de patologías de tipo neuro-músculo-esqueléticas mediante manipulaciones manuales musculares y articulares.
Es muy importante realizar un estudio biomecánico adecuado para así poder realizar, si es necesario, un tratamiento personalizado y ajustado a las necesidades de cada paciente. En la Clínica de Podología y Fisioterapia Alberto Sánchez realizamos una valoración completa tanto del pie como del resto del cuerpo.
Consiste en aplicar microcorrientes galvánicas, a diferentes niveles de intensidad, a través de una aguja de acupuntura en el tendón dañado, induciendo así a su autorrecuperación sin fármacos.
Es imprescindible que esta técnica sea aplicada con ecógrafo y por un profesional autorizado y homologado, como es nuestro caso.
Desde la Clínica de Podología y Fisioterapia Alberto Sánchez tomamos, además, todas las medidas de salud e higiene para garantizar la máxima seguridad de nuestros pacientes.
Tratamos las afecciones de la piel:
Y de las uñas:
Gracias a la ecografía podemos obtener una imagen de la articulación en tiempo real y en movimiento, proporcionando un resultado eficaz y rápido, así como un tratamiento preciso adecuado para cada patología.
¿Cómo funciona?
Los sistemas clínicos de ultrasonido se componen por una pequeña sonda conectada a un dispositivo con una pantalla de visualización.
La sonda explora el área del cuerpo pulsando ondas de sonido de alta frecuencia que se devuelven a la sonda y se transmiten al sistema de ultrasonido, donde se convierten en una imagen.
Las infiltraciones consisten en la introducción del medicamento directamente en la zona afectada a través de una jeringa. Los medicamentos utilizados suelen ser anestésicos, corticoides o colágeno.
Las infiltraciones se pueden realizar en articulaciones (pies, manos, rodillas, codos y hombros), nervios y tejidos blandos.
Generalmente se utilizan en procesos inflamatorios localizados para aliviar el dolor, recuperar la movilidad y acelerar la recuperación.
Se recomienda que tras una infiltración se guarde reposo durante las primeras 24-48 horas .